jueves, 2 de abril de 2009

Actos


Son actos

relojes remotos

son pasos dados

gritos en el aire

 

son series de voces

palabras en las manos

el pulso de la sombras

 

son bárbaros dolores

la silueta de la muerte

en la ropa perdida de la madre

 

son mis ojos en ella

que mira el mar y mi espalda

alternativamente

son mis párpados que callan

y cierran el alma

 

es el aire cada vez más difícil

el calor que sale

el frío que quiebra

y los monstruos que cobijo

 

es el silencio en la planicie vacía

la voz y el eco

                        solos

esperando hasta el dolor

el rayo que parta la tierra

y saque sangre en el barro

algún brillo

                  algo vivo

 

es esa vejez no tan a lo lejos

el cansancio al despertar

 

es el aire quieto

la desesperanza

o la suma de los actos

que acumulan errores

es mi tristeza

                    la de otros

que atesoro con cuidado

relojes remotos

tiempo mío.

 


 

A coro...

  


A coro mis ojos y tus ojos

danzando

               por las venas

tocados

reanimados sobre la tierra

                                          al viento

 

al viento

empujados

                 al aire como hojas secas

reticulados

                 en flor

nacidos apenas

ciegos de aire

 

como hojas blancas

                               a punto de vivir

tu pierna mi pierna a dúo

en este país escrito por fantasmas

 

aun nadaba al viento

en recta haciendo un surco

entre las hojas tuyas

                                 sin nombrar

buscando tus manos en el aire

 

vamos

cruzamos

tu voz mi voz al humo

buscando tu palabra que me diga

del árbol enraizado en ti

donde anhelo perderme.

 

 


Me arrojo



Me arrojo

al dorso

mientras el golpe del remo

hiere el agua

 

a la deriva

ciego

me precipito sobre el cielo

 

me guía el ocaso

el frío de la cara

la certeza del aire sobre mí

                                            mi sombra

 

de este lado

                    sumergido

mi brazo busca

brota

clama la mordida del remo

 

ya me voy

 

me buscan.




Quema



Quema

con el corazón

con la boca abierta

en el medio de mi

                              el ojo que pones

quema

 

saca sombras

quita vientos sofocantes

atraviesa lunas mías

navegaciones

besos de las manos

nieves negras detrás del alma

con el corazón abierto

con la boca

 

quema el latido

el aliento

de agónico dragón

acunado/ciego

sobre tus pechos lanzados al azar

al final del vuelo

 

quema/truena

el astro

             el techo

y en el delirio de tu boca abrasada

muerdo el incendio

y soy otra vez ese animal fantástico

ese león en llamas

                              que se aplaca.